Qué tendrá ese muchacho
Opinión Política ProvincialesPor Cristian Muriel
Hace exactamente un año, la gestión del intendente Gustavo Martínez cerraba la Plaza 25 de Mayo, el Parque 2 de Febrero y el Parque Laguna Argüello con la promesa de inaugurarlos en noviembre con mejoras integrales. La refuncionalización costaría unos $ 582 millones de pesos, aunque hubo denuncias de sobreprecios del 100% efectuadas por concejales de la oposición.
La prensa amiga se cansó de cruzar los dedos y meter la pata, postergación tras postergación jurando que ahora sí se venía la ‘Gran Inauguración Gran’ -la última fue antes del aniversario de la ciudad-, pero un año después los predios siguen cerrados y en ruinas.
En enero Martínez culpó al mercado: “El mecanismo de actualización de precios que prevén los decretos va muy por debajo del impacto que tiene la industria de la construcción. Eso nos afectó mucho”, pero en julio de 2022, apenas unos meses después de cerrar esos espacios emblemáticos, licitó obras por $ 700 millones para la Bienal de Esculturas (también hubo denuncias de sobreprecios).
La industria de la construcción parece afectar selectivamente al jefe comunal.
ERA POR AHÍ
Algo ocurrió entre octubre y diciembre del año pasado que hizo que Gustavo Martínez pasara de ser el jefe comunal con peor imagen del país (56,9% de imagen negativa según el ránking de CB Consultora) a terminar en el vigésimo lugar, cuatro puestos más arriba, con 52,3%.
El intendente parece entender mejor que nadie lo que es importante para los vecinos. Por eso, como a pesar de las demoras, la preocupación por los espacios verdes tomados no fue más allá de módicas protestas virtuales, dobló la apuesta y decidió “refuncionalizar” el Parque Ávalos por $ 190 millones.
¿La gente se volcó a las calles al grito de “¡Fuera tirano, devuélvenos los espacios verdes!”? No exactamente. La gente se volcó a las calles al grito de “¡Bombon Asesino!” de Los Palmeras.
A cambio de las plazas tomadas, Martínez le regaló a la vecindad una retahíla de espectáculos gratuitos al mejor estilo “Gestión Aída”.
De acuerdo al portal DataChaco, contratar a Soledad Pastorutti para el 145º Aniversario de Resistencia le habría costado al Municipio unos seis millones de pesos, y traer a “Los Palmeras”, 18 millones. Sobre el trapero Luk Ra no trascendieron cifras, ni sobre los grupos locales, con cachés seguramente más modestos. Antes se habían presentado el vecino ilustre Abel Pintos, Los Tipitos, Bahiano, Banda XXI, La Mosca, Hilda Lizarazu y Los Pericos, entre otros.
Martínez cambió las prioridades del Municipio y está cosechando los resultados.
OBRAS QUE SE VEN
Una de las cosas que más enojó al intendente durante 2022 fue la decisión del gobierno provincial de pavimentar calles y avenidas de Resistencia mientras le mezquinaba fondos al Municipio. Quizás con esos recursos no hubieran colapsado el servicio de recolección de residuos ni el sistema de transporte público de pasajeros.
Martínez sabe que obras son amores, y las mejores obras son las que se ven. Pero para que los vecinos sepan que se “está haciendo”, no es lo mismo mantener durante un año plazas y parques vallados (rémora de su gestión en Sameep, cuando destripaba veredas a mansalva) que inagurar avenidas y cosas por el estilo. Coqui le estaría llevando la delantera, haciéndose el “torazo en rodeo ajeno”.
Así que una vez más a Gustavo Martínez se le prendió la lamparita y anunció un “plan de iluminación” que abarcará “el 80% de la ciudad”, con un desembolso de más de $ 930 millones. Todo estará listo en seis meses. “Luces de mi ciudad” parece una idea brillante, y con recursos propios, para aclarar las cosas en los 198 barrios de Resistencia.